La cruda verdad sobre los conjuros milagrosos y las frecuencias vibracionales

Seguro te has topado con ellos en tus redes sociales: publicaciones que te prometen riquezas inimaginables en un abrir y cerrar de ojos, el amor eterno con tan solo recitar unas palabras, o incluso la solución a todos tus males a través de una melodía mágica que «vibra» en la frecuencia correcta. Ves imágenes deslumbrantes de fajos de billetes, parejas abrazándose bajo atardeceres perfectos y, por supuesto, el conjuro de moda o el enlace a ese video musical «sanador».

Permíteme ser completamente honesto y derribar estas ilusiones de una vez por todas: eso no funciona así. Y como alguien que ha dedicado su vida al estudio y la práctica de la brujería, me produce una profunda tristeza observar cómo tantas personas caen en estas trampas virtuales.

Mi frustración como brujo se duplica cuando me doy cuenta de la proliferación de videos que aseguran contener «música vibracional» capaz de atraer riqueza, salud o amor simplemente reproduciéndolos. Entiendo la búsqueda de bienestar y la esperanza de encontrar soluciones sencillas. Sin embargo, es crucial comprender un principio técnico fundamental que puedes investigar Tú mismo preguntando a cualquier ingeniero en computación o informática: cuando un archivo de audio se sube a internet y se comparte a través de plataformas de redes sociales, sufre un proceso de compresión.

Esta compresión, necesaria para facilitar la transmisión y el almacenamiento de grandes cantidades de datos, inevitablemente altera las frecuencias originales del sonido. Por lo tanto, esa melodía que supuestamente vibra en una frecuencia específica para atraer la abundancia o sanar dolencias, al pasar por múltiples procesos de codificación y decodificación en línea, pierde su pureza vibracional inicial. Es como copiar una fotografía una y otra vez; con cada copia, la calidad se deteriora.

Así que, aunque la intención detrás de algunos de estos videos pueda ser genuina, la realidad técnica es que su efectividad vibracional se ve significativamente comprometida, si no anulada por completo, al ser distribuida a través de internet. Eso sin contar con que creer que simplemente escuchar estos audios transformará tu vida de manera instantánea es, lamentablemente, una ilusión.

«¿Entonces esto de la magia es puro cuento?» Te explico:

Un ritual bien ejecutado para la prosperidad, el amor o cualquier otra meta sí puede funcionar, y funciona. Lo que quiero que entiendas es que el error radica en la expectativa de la inmediatez. Un ritual mágico no es una máquina expendedora. Es más bien como el proceso de preparar una tierra para que dé frutos. Si siembras una semilla hoy, ¿esperas cosechar mañana? Claro que no. Necesitas preparar la tierra, sembrar en el momento adecuado, regar, abonar, proteger de plagas, esperar el sol y, eventualmente, la planta crecerá y dará su fruto.

Con la magia ocurre algo similar. Cuando se realiza un ritual, se están moviendo energías, se están creando las circunstancias propicias para que aquello que anhelas pueda manifestarse en tu realidad. Esto implica:

• Alinear tu energía: Primero, hay que trabajar contigo para asegurarnos de que tu propia vibración esté en sintonía con lo que deseas. Si pides abundancia, pero tu mente está llena de escasez, hay una contradicción.
• Mover obstáculos: A veces hay bloqueos energéticos como otros trabajos de brujería en tu contra, miedos o patrones inconscientes que impiden que el camino se abra. El ritual ayuda a removerlos, pero esto toma tiempo en manifestarse en tu vida diaria.
• Crear oportunidades: La magia abre puertas, pero no te empuja a través de ellas. Crea escenarios donde las oportunidades pueden presentarse, pero eres tú quien debe estar atento y actuar cuando aparezcan.
• El tiempo de gestación: Las cosas en el plano físico tienen un ritmo. Un nuevo trabajo, una relación sana, una mejora económica… todo esto requiere que se organicen eventos, que las personas adecuadas aparezcan, que las oportunidades se materialicen. Esto no puede ser «ya mismo». Prometer que lo que anhelas va a suceder de forma inmediata es, simplemente, engañar a la gente.

Para mí, como practicante de la brujería, resulta desalentador presenciar cómo la desesperación y la búsqueda de soluciones rápidas llevan a la gente a depositar su fe en este tipo de contenidos superficiales y, a menudo, engañosos. Y la decepción se torna aún mayor cuando recibo mensajes pidiéndome exactamente lo mismo que se promueve en esas publicaciones: «Necesito un conjuro urgente para pagar mis deudas» o «¿Tienes alguna oración infalible para que esa persona se fije en mí?».

Me solicitan el camino fácil, la fórmula mágica que evite el esfuerzo, la autoevaluación y el trabajo constante. Y mi respuesta, aunque a veces pueda ser decepcionante, siempre será la misma: ese atajo no existe.

Espero que entiendas el punto más importante d esta enseñanza: El amor, la prosperidad, la salud y la felicidad pueden lograrse con magia; pero, no se materializan de forma instantánea ni por la reproducción de un video viral. No te dejes seducir por las promesas vacías de las redes sociales. Si requieres cualquier trabajo de brujería, brujería auténtica y no charlatanería, llámame. Estoy aquí para ayudarte.